El 20 de diciembre de 1973, Carrero Blanco, se dirigía en
coche a las oficinas del gobierno después de haber estado por la mañana en la
iglesia, ruta que seguía a rajatabla todos los días. Esta tradición de Carrero
Blanco hizo que fuese mucho más fácil que los terroristas de la ETA llevasen a
cabo su plan: asesinarle. Y así lo hicieron con una bomba de gran potencia que
pusieron en las calles de Madrid y detonaron justo cuando Carrero Blanco pasaba
con su coche. El coche voló por los aires literalmente, pues se cuenta que
llegó a sobrevolar un edificio y caer sobre el tejado de los edificios de la
calle paralela. Esta explosión no dejó supervivientes dentro del vehículo. Este
era el primer crimen que había desarrollado la ETA fuera del país vasco.
Hueco que dejaron los explosivos tras el atentado contra Carrero Blanco. |
Parábola que siguió el coche de carrero blanco tras la explosión. |
Este asesinato impactó mucho en las conciencias de los ultras
del gobierno, llegando a ocasionar las lágrimas de Franco, el cual incluso
acudió a los brazos de un pontífice, a pesar de que no era muy respetado por
los ministros. La muerte ocasionaba un vacío de poder, hueco que debía ser completado
con otra persona y, como Franco no estaba en condiciones de volver a gobernar,
designó como sustituto a Carlos Arias Navarro. Como éste no era aceptado por
los ministros del gobierno, Franco consideró a otros cuantos candidatos pero al
final, Arias Navarro acabó llegando al poder. Arias Navarro se pronunció en
favor de una continuidad política respecto a Carrero Blanco, dando esperanzas a
los aperturistas y los reformistas.
En los años 70, el ciclo expansivo de la economía española se
frenó debido a la subida del precio del petróleo y los cambios que demandaban
los reformistas no tenían un contexto adecuado para llevarse a cabo. Arias
suscitó unas pésimas relaciones con los eclesiásticos, pues en el País Vasco se
demandaban nuestros derechos que el gobierno no quiso entregar y ejerció una
dura represión contra ellos. Esta actuación se ve justificada por los intentos
de Arias Navarro de integrarse con los ultras franquistas.
La dictadura portuguesa de Salazar cayó y con ellos se creó
miedo entre las filas de franquistas españoles que veían cada vez más cerca el
final del franquismo. En España la oposición al régimen, aunque dividida, se
organizaba esperando a que muriese Franco para alzarse en pos de un nuevo
régimen. Los franquistas veían esta organización como una amenaza al
nacionalismo y el orden social y por ello también se prepararon. Mientras
tanto, aumentó la represión a la oposición y se crearon asociaciones que
redujesen los derechos a los contrarios al régimen.
Cuando Franco enfermó de flebitis y fue ingresado en un
hospital, se pensaba con cierto optimismo que quizá el Caudillo pudiera dimitir
en favor de Juan Carlos. Franco delegó poderes, provisionalmente, en el
Príncipe: fue una experiencia humillante para él. Franco mostró una notable tenacidad,
y después abandonó el hospital, y sin perder tiempo reasumió sus poderes.
Mientras tanto, en Marruecos y en otros países cercanos había problemas con la
repartición de los recursos minerales. Especialmente en Marruecos se comenzó a
ver mal la relación que había con España y, a pesar de los intentos de Franco,
el rey de Marruecos anunció la “marcha verde” para frustrar las estrategias de
Franco. Franco no tomó represalias, pues no estaba tenía las condiciones de
salud necesarias para dirigir un nuevo conflicto.
Franco recuperándose en el hospital. |
Comentario
personal: Es increíble que el coche de Carrero Blanco volase tanto. Los etarras
podían haber ahorrado dinero en explosivos pero en vez de eso, emplearon
muchísimos, seguramente porque la cantidad de explosivos era directamente proporcional
al odio que sentían hacia él. De todas maneras, los medios que empleaba la ETA
no eran sino justificados solamente por ellos mismos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario